"Un niño que lee, es un adulto que piensa" (Día del Libro)

 

Hoy los peques han echado una buena mañana, y es que  "El día del libro" había que celebrar. Han sido los dibujos y unas pequeñas letras las que han contado a nuestros peques historias que no dejaban de hacer volar su imaginación, pues en la clase comenzó la diversión, varios cuentos les leía y mientras miraba sus caritas, les atrapó la lectura que para ellos ha sido una gran aventura.












El patio de nuestro "cole" también nos ayudó, pues él mismo se convirtió en una biblioteca al aire libre, que les permitió disfrutar cada segundo de las letras y dibujos de una forma más alegre. Impresas esas historias en cada hoja de papel, cada cuento sin parar no dejaban de leer, algunos muy graciosos lo hacían con el libro al revés, pero lo mas importante es que su gusto por las letras en el día de hoy se dejaba ver.






Los tres cerditos, el lobo, la Cenicienta, Blancanieves, la Ratita presumida, los siete enanitos y cabritillos, Alicia...; son algunos de los personajes que en esta mañana los acompañaron, despertando en ellos curiosidad y al mismo tiempo su creatividad, pues cuando tomaron los libros en sus manos algunas historias se inventaron, con solo ver los dibujos a sus compañeros con su lectura imaginativa atraparon.





Entre sonrisas y buena compañía, celebramos  "El día del libro" con gran alegría.




A casa nos fuimos muy contentos , con nuestro delantal de los cuentos.




Cada libro tiene la maravillosa capacidad de hacernos soñar, de hacernos conocer y al mismo tiempo nos enseñan a comprender, que la vida es como un libro que muchos han de leer y que hay que pasar por el mundo haciendo el bien.



P. Luis Pérez Ponce, hoy te celebramos!

 

El día 18 de abril celebramos la conmemoración de la muerte del P. Luis Pérez Ponce, sacerdote fundador de las Hijas del Patrocinio de María, el cual entregó su vida al servicio de los demás. Su muerte un día como hoy se recuerda, y lo hemos hecho como a él le hubiese gustado celebrarlo, entre los niños, con risas, juegos y cantos que no dejan de hacer crecer a nuestros peques en valores ciudadanos, como la solidaridad y el compartir, los cuales les llevan a ser niños tan felices como el Padre Luis.

Iniciamos esta jornada haciendo conocer su historia, a través de un cuento que nos fue explicando la vida del Padre Luis y su interés por hacer el bien a los demás, desde los más pequeños con las catequesis, hasta los más mayores como fue su servicio a aquel soldado enfermo que causó su muerte, poniendo en práctica aquello que más sabía hacer, que era servir con amor a su prójimo y no dejarlo desfallecer, como bien nos dice una de sus frases "No desmayen en el camino comenzado, tengan fe".




Las miradas de los peques no se apartaban de aquellas ilustraciones, pues entre los colores y valores mostrados poco a poco les tocó el corazón, llenándoles de inquietudes, de preguntas y al mismo tiempo de admiración por aquel personaje que hizo tanto bien a la educación y que hoy sigue vivo su carisma en cada religiosa y seño que con amor educan a tantos niños con vocación.

Luego, con alegría dieron color a imágenes en blanco que mostraban al fundador, cada uno con mucho arte y con su toque particular coloreaban al Padre Luis mientras no paraban de hablar, entre diversos colores mostraron al fundador que desde el cielo los cuida con ternura y con amor.





Llegó el momento de hacer honor al P. Luis y lo hacemos con emoción con diversos juegos. El cole de Baena es uno de los que él fundó por ello disfrutamos este día en su honor, jugamos sin parar hasta ya no poder más y comenzamos con  "carrera de velocidad", que nos invitan a mirar lo veloces que podemos ser y más todavía cuando juntos lo solemos hacer.



Luego "la patita coja" nos ayuda a comprender que no hay obstáculo que valga si tus compañeros te animan para no perder. Es divertido verlos de esta manera crecer entre un juego y otro los valores no paran de fortalecer. 





"La pelota que quema" les hacía actuar con rapidez, de manera que ningún compañero quedase con ella en sus manos para no perder, aunque así fuese hoy lograron comprender que también es importante perder para poder crecer.




"Atrapa la cola", es uno de los juegos que más disfrutan, pues aprenden a proteger su colita del adversario y el que consigue más colitas y mantiene la suya a salvo gana, es muy bonito verles animarse pues la competencia sana les lleva a convertirse en un solo equipo. 









"La gallinita ciega", otro juego tradicional con el cual disfrutaron mucho para no dejarse atrapar, algunos ayudaban a la gallina acercándose a ella hablándole y sonriéndole,  para así continuar la aventura que no acaba de terminar.



Cerramos con "el pollito inglés" y "la rayuela" para culminar un día divertido que al P. Luis nos recuerda.







Cada juego compartido nos llenó de emoción porque la vida del fundador sigue viva en cada corazón, sus valores y enseñanzas hoy nos acompañan y siguen vigentes en nuestras aulas.